¿Estas enterado de la PROCESIÓN DEL SILENCIO?. Acompáñanos en este post a la increíble tradición que se lleva acabo en San Luis Potosí, una muestra de los hermosos eventos que nos ofrece nuestro querido y hermoso México.
La tradición de la Procesión del Silencio tiene sus orígenes en la España del siglo XIII, cuando los sacerdotes franciscanos iniciaron sus procesiones de Sangre en las que éstos se inflingían castigos físicos y representaban escenas relativas a la Pasión de Cristo
Cada Viernes Santo las calles del centro de San Luís Potosí adquieren un tono sorprendentemente místico. Aproximadamente a las 20:00hrs Da inicio una marcha que convierte a la ciudad en escenario de la Procesión del Silencio, el mayor ritual religioso de la capital, que año con año guarda luto por la muerte de Jesús.
¿Dónde Inicia?
Todo este maravillo evento da comienza en la explanada de la Plaza del Carmen, cuando la representación de las tropas romanas abre el preámbulo de la noche con el redoble de sus tambores y las notas de un clarín. Después, el guardia pretoriano adelanta al grupo y toca tres veces la puerta del Templo del Carmen, al mismo tiempo que el clarinero demanda silencio a los presentes. La multitud obedece y se crea en los alrededores un ambiente de completa expectación. Entonces las puertas del templo se abren y comienzan a despuntar sobre la plaza las primeras cruces y cirios que va llevando en alto el grupo.
¿Qué sucede?
Las calles a su alrededor se llenan de faroles y capuchas cónicas que avanzan con una muy calmada paciencia, en gesto de duelo. Todos los cofrades portan emblemas e imágenes religiosas, y visten de acuerdo a los colores que son pertenecientes a su grupo. Destaca la presencia de algunas con fuerte rasgos locales, como la de los charros y las adelitas, así como las cofradías Chirimía y Teponaxtle, ambas conformadas por grupos indígenas. Así mismo la figura de la Virgen de Nuestra Señora de la Soledad es la mayor protagonista del desfile, la cual es transportada por los hombros de 40 hombres debido que pesa más de una tonelada
A lo largo del trayecto se pronuncian pregones y saetas que detienen la procesión en puntos claves. Estas voces retóricas, pertenecientes a la tradición sevillana, brindan un abrumado homenaje a manera de recital y canto. Los pregones son un discurso reflexivo que tiene como finalidad resaltar la esencia de la Semana Santa; mientras que las saetas son una entonación aflamencada que irrumpe rotundamente en todos los callejones, lamentando la crucifixión de Jesucristo.
Después de recorrer las calles de Villerías, Universidad, Galeana, Independencia, Av.Venustiano Carranza, Aldama, Madero y Manuel José Othón, el recorrido llega justo donde comenzó: en el Templo del Carmen. Al aproximado de la media noche llega la última cofradía y finalmente las puertas del templo se cierran y con eso concluyen. Llega el tiempo de que la ciudad duerma para celebrar al día siguiente - mediante una serie de liturgias especiales que se realizarán en todos los templos.
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